Viajar al extranjero es el mejor plan para el verano. Salir, aprender un idioma, disfrutar de la experiencia, conocer otras culturas y formas de vida... Una larga lista que de por sí ya podría llenar la maleta, pero que no es suficiente. La maleta hay que hacerla y no es una tarea fácil ni apetecible.

Ya ha llegado el momento, lo has conseguido, estás sentado en el avión y no hay marcha atrás, ¡te vas al extranjero! Un doble sentimiento de alegría y miedo se mezclan y, aunque extraño, es placentero. Pero de repente, una terrible sensación de abandono recorre tu cuerpo, un escalofrío te deja helado y cunde el pánico por unos segundos al visualizar ¡el adaptador universal encima de tu escritorio!.

Que no cunda el pánico... Sabemos la ropa que tenemos que llevar, la bolsita de aseo con todo lo necesario está preparada y una larga lista de "porsiacasos", que nunca saldrán de tu maleta, aportan el kg de más que no te va a dejar respirar tranquilo hasta que no veas tu equipaje desfilar por la cinta transportadora.

La siguiente lista de cosas imprescindibles en tu maleta es la que tienes que repasar para que tu viaje sea perfecto.

1. Documentación en regla
Este es el punto más importante a tener en cuenta. Revisa que tu pasaporte y DNI estén en regla y busca un seguro de viaje que cubra posibles incidencias allá donde vayas. Mete tu billete, tu documentación y tu lista de direcciones y contactos en una bolsita o cartera impermeable que tengas siempre a buen recaudo.

2. Adaptador universal 
Es importante que sepas que en muchos destinos fuera de España los enchufes son diferentes. Si no llevas un adaptador, ólvidate de cargar el móvil, la cámara, o el ordenador... ¡es el fin del mundo!

3. Cargador de móvil y de cámara
Lleva siempre tu teléfono con la batería llena. Aunque no lo uses demasiado porque estás de vacaciones y hay que desconectar, es importante que estés localizable y que puedas llamar en casos de emergencia. 
Además, para no olvidar ni un detalle de tu viaje debes inmortalizar todos los momentos que puedas, ya que los recuerdos muchas veces se olvidan, pero las fotos hacen que siempre permanezcan. Por ello, tu cámara de fotos debe estar siempre cargada y preparada.